El gobierno de Pullaro incorporó 1300 asesores técnicos que no tienen funciones definidas ni un lugar de trabajo asignado, entre ellos estaría la madre de los hijos del gobernador, quien forma parte de la planta permanente desde hace 14 años.

El discurso de austeridad promovido por el gobernador Maximiliano Pullaro quedó bajo la lupa tras conocerse la contratación de 1300 asesores técnicos por parte de su administración. A pesar de que el mandatario insiste en la necesidad de ajustar el gasto público, la incorporación masiva de personal sin funciones claras despierta interrogantes sobre la coherencia entre el relato oficial y las decisiones concretas de gobierno.

Estos asesores no tienen un lugar físico de trabajo asignado ni tareas específicas dentro de la estructura estatal. Esta situación pone en duda la transparencia y la eficiencia en la utilización de recursos públicos, especialmente en un contexto donde se reclama austeridad y racionalización del Estado.

El caso cobró mayor repercusión al conocerse que entre los contratados se encuentra la madre de los hijos del gobernador. Aunque ella forma parte de la planta permanente desde hace 14 años, su inclusión en esta nueva estructura de asesores refuerza las sospechas sobre posibles acomodos y favoritismos en el armado de los equipos técnicos.

La falta de precisiones sobre el rol de estos 1300 asesores y los criterios utilizados para su designación complica aún más la defensa del gobierno provincial. Organizaciones civiles y referentes opositores ya comenzaron a exigir explicaciones públicas, mientras crece el malestar social por la contradicción entre el mensaje de ajuste y la expansión de la planta política.

Tendencias